Scotland’s crannogs older than Stonehenge

La hepatitis es una enfermedad caracterizada por la inflamación del hígado y tiene varios tipos, entre ellos, hepatitis A, B y C. En el mundo entero, aproximadamente 240 millones de personas tienen una infección por hepatitis B y 80 millones tienen una infección por hepatitis C. Según la Organización Mundial de la Salud, anualmente fallecen casi 1.4 millones de personas a causa de una hepatitis viral.

En EE. UU., alrededor de 5.3 millones de personas tienen hepatitis. La doctora Stacey Rizza, especialista en enfermedades infecciosas de Mayo Clinic, dice que “todo lo que le afecta al hígado y le causa inflamación, por definición, es hepatitis”.

 

La Doctora Rizza divide al abecé de la hepatitis

·“La 'A' corresponde al primer tipo de infección, la cual se contrae por agua o comida contaminada. Si bien uno puede estar muy enfermo, no se convierte en infección crónica”. Las vacunas protegen contra la hepatitis A y son particularmente importantes para niños y viajeros.

·“La hepatitis B es el segundo virus que se ha identificado y el causante de una infección crónica; pero afortunadamente, hay una vacuna muy, muy eficaz contra la hepatitis B”.

·La hepatitis C se transmite a través de los líquidos corporales. El virus daña el hígado y causa la muerte.

El virus normalmente se propaga mediante la ingesta de comidas o bebidas contaminadas con materia fecal, incluso en cantidades muy pequeñas. No se transmite al estornudar ni al toser. Los casos leves de hepatitis A no necesitan tratamiento. La mayoría de las personas infectadas se recuperan por completo sin daños permanentes en el hígado. Una de las mejores maneras de protegerse contra la hepatitis A es practicar una buena higiene, como lavarse las manos con frecuencia. Las personas con mayor riesgo pueden aplicarse la vacuna.

Los signos y síntomas de la hepatitis A, generalmente, aparecen después de haber tenido el virus durante algunas semanas. Sin embargo, no todas las personas con hepatitis A los manifiestan. Los signos y síntomas, si los presentas, pueden comprender los siguientes: Fatiga, náuseas y vómitos repentinos, dolor o malestar abdominal, especialmente en la parte superior derecha debajo de las costillas inferiores (en la zona del hígado), evacuaciones intestinales de color arcilla, pérdida de apetito, poca fiebre, orina de color oscuro, dolor articular, color amarillento en la piel y en la parte blanca de los ojos (ictericia), picazón intensa.

Estos síntomas pueden ser relativamente leves y desaparecer en pocas semanas. Sin embargo, a veces, la infección por hepatitis A ocasiona una enfermedad grave que dura varios meses.

“Pese a que no existe vacuna contra la hepatitis C, en los últimos años, hay terapias muy eficaces para tratarla”, puntualizó la especialista de Mayo Clinic.