Scotland’s crannogs older than Stonehenge

Una receta ancestral compartida por varias generaciones de una misma familia dio inicio a una pequeña empresa que actualmente se dedica a llenar de sabor y olor las diferentes cocinas hondureñas.

Todo comenzó en el año 1960, en la casa de la familia Polanco en Ocotepeque, Ocotepeque, sin más enseres que un buen comal y un molino de mano, y siguiendo al pie de la letra una receta artesanal. Así nació Especias y Condimentos “El Torito”, bautizada con ese nombre, por el amor que el patriarca de la familia, don Evelio Antonio Polanco Sosa (QDDG), sentía por un animal al que cuidaba con especial esmero.

Las ventas iniciaron de casa en casa y en algunas pulperías, hasta que la familia decidió migrar a Tegucigalpa con el sueño de don Evelio de hacer crecer su negocio. Ya en la capital hondureña, Ronald Gerardo Polanco, hijo de don Evelio, tomó las riendas del negocio e inició los trámites para establecerlo como una pequeña empresa.

Ronald diversificó la pequeña empresa e introdujo más productos con materia prima 100% hondureña de su natal Ocotepeque. Convencido y orgulloso de la calidad de las especias y condimentos buscó nuevos mercados y fue en el 2010 cuando conoció el programa Una Mano Para Crecer (UMPC) de Walmart, lo que le permitió colocar su producto en supermercados y darlo a conocer a nivel nacional.

De especias y cominos, con el apoyo de UMPC, la pyme pasó a la producción de achiote, romero, anís, pimienta gorda, canela, clavo de olor, curry, linaza, sal de ajo, sal de cebolla, orégano, nuez moscada, azafrán, laurel, entre otros condimentos, en diferentes pesos y empacado en bolsa. El crecimiento de la empresa ha permitido brindar empleo permanente a cinco personas.  

 “De eso se trata Una Mano Para Crecer, de que avancemos juntos, de que crezcamos juntos, que generemos prosperidad y más desarrollo. UMPC es una iniciativa de valor compartido que busca promover el desarrollo de las comunidades y el crecimiento y fortalecimiento de las pequeñas y medianas empresas”, comenta Lynda Marín, subgerente de Asuntos Corporativos de Walmart.

Como empresa familiar, Especias y Condimentos “El Torito” era liderada por Ronald Gerardo Polanco, con el apoyo de su esposa Patricia Ramírez Palacios, quien se dedicaba a organizar degustaciones para clientes, mientras que su hijo mayor, Evelio Polanco, le apoyaba en la comercialización.

Con una pequeña empresa en crecimiento y una familia consolidada, los Polanco – Ramírez fueron sorprendidos por la pandemia del Covid-19. Lamentablemente, el 16 de junio del año 2020, Ronald Gerardo Polanco falleció a causa del virus.

Resurgimiento

Con 38 años, Patricia Ramírez Palacios tuvo que asumir uno de los retos más grandes de su vida, y de esa dolorosa pérdida tuvo que renacer como una valiente emprendedora. “La vida se paralizó para mí, sentí que todo se había acabado, perdí a mi esposo, al amor de mi vida, el padre de mis dos hijos, el líder del hogar y el hombre que manejaba la empresa familiar. Él sabía el ‘teje y maneje’ como decimos, y se nos fue todo en un abrir y cerrar de ojos”, recuerda Patricia.

“Al día siguiente de enterrar a mi esposo, mi hijo mayor Evelio me dijo que iba ir a trabajar porque había que cumplir con los pendientes que dejaba el papá, yo estaba sumergida en mi tristeza, pero entendí que la mejor forma de honrar su memoria era continuar con el negocio por el que tanto había luchado. Tenía que ser resiliente”, expresa Patricia.

Dos semanas después, “El Torito” iniciaba una nueva etapa, esta vez liderada por Patricia y sus dos hijos Evelio y Ronald. “Mi esposo nos dejó las herramientas de trabajo y yo no podía dejar que se perdieran, empecé a empaparme de todo lo referente a la empresa, me puse en contacto con los ejecutivos de Walmart y ellos me orientaron y me acompañaron en los procesos que debía realizar como proveedora”, relata.

Dos años después, con pasión, amor, entrega y mucho trabajo, Patricia ha ido cumpliendo los sueños de su esposo. “Justo ahora estamos implementando una nueva presentación en bote de nuestros productos, como las especias, adobos, achiote, sal de ajo y cebolla, la cual ha sido bien aceptado por los clientes, esperamos pronto tenerlo en el supermercado”, expresa llena de orgullo.

“Impulsar el producto y ver crecer nuestra marca es una de las mayores alegrías de mi vida, para lograrlo, el apoyo de Walmart ha sido fundamental, puedo decir que gracias a ellos seguimos de pie, gracias a ellos nos hemos levantado, ellos han sido nuestro mayor apoyo para llegar a otras áreas, Walmart nos motiva cada día a mejorar, han sido nuestro apoyo incondicional”, afirma Patricia.

Especias y Condimentos “El Torito” continúa fiel a la tradición con la que nació, con una receta transmitida de generación en generación y con materia prima cultivada en Ocotepeque. Actualmente, El Torito destina el 70% de su producción a Walmart. El próximo sueño es exportar a nivel centroamericano y luego al resto del mundo.

“Hay dolores con los que tenemos que aprender a vivir, pero también podemos transformarlo en la fuerza que necesitamos para salir adelante, las mujeres podemos lograrlo a pesar de las circunstancias, y más cuando se cuenta con el apoyo de empresas como Walmart que valoran y pagan un precio justo por el producto, es algo que nos impulsa a no desistir de nuestros sueños”, concluye Patricia.

Actualmente Walmart en Honduras, apoya 61 pymes, enfocando los esfuerzos en promover el empoderamiento económico de la mujer, de manera que el 26% de estos emprendimientos son liderados por mujeres. Las pymes hondureñas generan 960 empleos directos y venden 372 productos en las 111 tiendas a nivel nacional.

Walmart, a través de sus programas Una Mano para Crecer y Tierra Fértil, brinda múltiples ventajas a las pymes manufactureras y los productores agrícolas proveedores de sus supermercados, tales como acceso a un mercado seguro y creciente, capacitación técnica, pronto pago, acceso a la Oficina del Mediador, entre muchos otros beneficios.

Walmart Centroamérica mantiene relaciones comerciales con 1,086 proveedores pymes beneficiando a más de 24,300 familias y generando más de 19,300 empleos directos.