Scotland’s crannogs older than Stonehenge

 

Los antimicrobianos en particular los antibióticos son medicamentos que se utilizan para prevenir y tratar infecciones en los seres vivos. Muy útiles desde todo punto de vista pero que, debido a varias causas, como su mal e indiscriminado uso, han determinado que las bacterias u otros microrganismos que nos infectan se vuelvan resistentes al tratamiento con antimicrobianos y dejen de responder a los medicamentos, lo que hace más difícil el tratamiento de las infecciones e incrementa el riesgo de propagación de enfermedades, de aparición de formas graves de enfermedades y de muerte.

 

  La resistencia a los antimicrobianos es una de las 10 principales amenazas de salud pública a las que se enfrenta la humanidad, ha declarados la OMS, resaltando la importancia de prevenir este mal.

El uso incorrecto y excesivo de los antimicrobianos es el principal factor que determina la aparición de gérmenes resistentes a los fármacos. Se menciona especialmente la prescripción de antibióticos en infecciones agudas del aparato respiratorio superior que se estima son en un 75% de origen viral donde el uso antibiótico, que es para tratar infecciones bacterianas, es poco justificado.

 

El costo de la resistencia a los antimicrobianos para la economía es y será muy considerable. Además de muerte y discapacidad, la prolongación de las enfermedades se traduce en estancias hospitalarias más largas, la necesidad de medicamentos más caros y dificultades financieras para las personas afectadas.

 

Para el 2050, se esperan 10 millones de muertes atribuibles a la resistencia a antibióticos. Será la principal causa de muerte. Superará al cáncer. Morirá una persona cada tres segundos por resistencia a antibióticos. Ya para el 2019 hubo un estimado de 4,95 millones muertes asociadas con resistencia a los antimicrobianos, lo que hace predecir que esa cifra se superara fácilmente.

Se necesitan urgentemente nuevos antibacterianos pero el desarrollo de estos es lento, para el 2019 solo seis se clasificaron como innovadores agravando de esta manera la perspectiva a futuro.

 

En este contexto la necesidad de nuevos medicamentos y la experiencia tradicional del uso de fármacos de origen vegetal o fitofármacos ha tomado relevancia, siento algunos de ellos respaldados por múltiples estudios y por una experiencia que avala su utilización.

 

 

HIGEAFARMA S.A. consciente de este problema, se suma a la prevención de la resistencia bacteriana poniendo a disposición del cuerpo médico ESINMUNE, la combinación de ECHINACEA PURPUREA 250 mg más PELARGONIUM SIDOIDES 13.4 mg en 5 ml, diseñado en dosis terapéuticamente correctas para un óptimo tratamiento. Tanto la Echinacea como el Pelargonium son extractos que tradicionalmente han demostrado su eficacia frente a infecciones de tipo viral y bacteriana constituyéndose en los fitofármacos más utilizados en Estados Unidos y Europa y hoy comercializados en forma conjunta de manera única en Honduras.

 

Esta combinación refuerza la capacidad del sistema inmunitario de frente a las infecciones, posee eficacia directa antibacteriana y antiviral y lo mas importante no genera resistencia reduciendo potencialmente el riesgo de infecciones respiratorias severas, infecciones respiratorias recurrentes y sus complicaciones. Es producido en EEUU con buenas prácticas de manufactura americanas,

 

 

 

Siempre es importante no descuidar la prevención y ahí cobra mucho interés la forma de alimentación y los suplementos que de manera ocasional o permanente debemos consumir. Uno de los más importantes, como es conocido, es la vitamina C, que lastimosamente no se absorbe en cantidades altas que son necesarias para la prevención y tratamiento, por lo que se requiere la administración directa intravenosa.

 

En la actualidad existe una forma farmacéutica liposomal que envuelve la molécula de vitamina C con una sustancia denominada fosfolípidos, determinando que la absorción sea prácticamente el doble con el beneficio que ello implica, se comercializa en Honduras con el nombre de  ASCORFORT LIPOSOMAL, único fármaco con esta característica.